El modelado del pensamiento comienza desde muy temprana edad, cuando el sector más vulnerable de la sociedad, los niños, es víctima del proceso de ideologización a través de distintas vías.
Por Maibort Petit
Los regímenes totalitarios requieren de un pueblo inerte, sumiso, obediente y, sobre todo, no cuestionador, algo difícil de lograr en una sociedad acostumbrada a la libertad que brinda la democracia, por lo que, entonces, deben recurrir a la aplicación de distintos métodos destinados al cambiar y moldear el pensamiento de los ciudadanos a sus intereses. El lavado de cerebro aplica en la población adulta, mientras el adoctrinamiento es la fórmula en el caso del sector más vulnerable de la sociedad: los niños.
El régimen surgido en diciembre de 1998 con la elección de Hugo Chávez Frías como presidente de Venezuela no fue ajeno a este tipo de procedimientos, aunque su primer paso al instalarse en el poder fue arrasar con la institucionalidad a través de la instauración de una Asamblea Nacional Constituyente que redactó una nueva Constitución y procedió a dar los primeros pasos en la demolición de las instituciones fundamentales del país, o mejor, de la democracia, de sus cimientos. En ese trámite transcurrió la primera de sus administraciones, teniendo en el golpe de estado del 11 de abril de 2002, la justificación para acelerar el proceso y dar al traste y de forma definitiva con la meritocracia como valor y camino para avanzar y crecer, para sustituirlo por la incondicionalidad en desmedro de que se reúnan las condiciones para ocupar posiciones.
Ya en su segundo mandato se afianzó la acción dirigida a la transformación del hombre, para convertirlo de ciudadano democrático a militante socialista, una tarea que debía iniciar desde la primera edad. Durante mucho tiempo circuló insistentemente la especie de que el gobierno planeaba instaurar la patria potestad estatal mediante la nueva la Ley Orgánica de Educación que discutía la Asamblea Nacional. No era esto algo difícil de creer, toda vez que el gobierno desde 2006 actuaba a su antojo en razón de que el Poder Legislativo Nacional estaba en absoluto dominio chavista al haberse retirado la oposición de los comicios parlamentarios que tuvieron lugar el 4 de diciembre de 2005.
Regímenes totalitarios como el de la Alemania nazi y la Unión Soviética de Stalin pusieron en práctica este tipo de control sobre los hijos de la población de sus países, implementando la patria potestad en manos del Estado. La sociedad civil venezolana —aun para ese entonces con capacidad de maniobrar y accionar— se movilizó y tuvo éxito. El ministro de Educación para época, Héctor Navarro, salió al paso y negó que esto formara parte del proyecto de ley que se discutiría en el Poder Legislativo y aseguró que tal rumor era sólo el producto “una campaña basada en mentiras”.
Aseguró el ministro Navarro que la especie de que la nueva ley despojaría de la patria potestad a la familia de los menores se difundió a través de emisoras de Miami, cuyas transmisiones sostenían que "el régimen iba a concentrar a los niños en círculos infantiles desde los tres hasta los 20 años''. Subrayó que la patria potestad "no es de ámbito educativo'', sino que era un asunto recogido en la Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescente[1].
Pero haya sido cierto o no que el régimen de Chávez haya pretendido implementar la patria potestad estatal, no cabe dudas sobre su firme intención de adoctrinar a los menores.
“Con mis hijos no te metas”
Uno de esos primeros intentos de Chávez fue el Decreto Presidencial 1011 de octubre del referido año, con el cual se modificaba parcialmente el Reglamento del Ejercicio de la Profesión Docente al instituirse los supervisores itinerantes con amplias facultades sobre las escuelas y que se erigía como una amenaza a la educación privada. Además, permitía la participación de maestros cubanos en los planes de alfabetización que instrumentaba el gobierno[2].
La respuesta de la sociedad civil fue contundente y se popularizó a través del lema “Con mis hijos no te metas” y el gobierno se vio obligado a desistir de su implementación.
La resolución 058
No quiere decir que no se haya habido intentos del gobierno chavista para cambiar el sistema educativo, su politización y su intervención.
Según decir de algunos, desde 1999 en dieciocho ocasiones se intentó dicha intervención de las escuelas hasta que en 2012 el asunto se recogió en la Resolución 058 del Ministerio del poder Popular para la Educación, mediante la cual se establece el Consejo Educativo. Esta medida derogaba la Resolución 751 vigente desde el 10 de noviembre de 1986, la 114 del 19 de febrero de 1987 y la 1.675 del 31 de octubre de 1997 Esta resolución 751 versaba sobre la Comunidad Educativa “como una institución democrática y participativa, a los fines de contribuir al desarrollo de la gestión educativa; formada por educadores, padres o representantes y alumnos de cada Plantel, previendo de forma optativa la participación de otras personas vinculadas con el desarrollo de la Comunidad en general, tal como lo establecían los artículos 1 y 2 de la mencionada resolución”.
Estos integrantes de la Comunidad Educativa se organizaban a través de el Consejo Consultivo, los Docentes, la Sociedad de Padres y Representantes y la Organización Estudiantil. Al derogarse la resolución 751, se suprimían entonces dichos órganos que daban funcionamiento a la Comunidad Educativa.
La Comunidad Educativa de acuerdo a la Ley Orgánica de Educación de 2009 definía la Comunidad Educativa como “(…) un espacio democrático, de carácter social comunitario, organizado, participativo, cooperativo, protagónico y solidario. Sus integrantes actuarán en el proceso de educación ciudadana de acuerdo con lo establecido en la Constitución de la República, leyes y demás normas que rigen el Sistema Educativo. A tales efectos: 1. La comunidad educativa está conformada por padres, madres, representantes, responsables, estudiantes, docentes, trabajadores administrativos y trabajadoras administrativas, obreros y obreras de las instituciones y centros educativos, desde la educación inicial hasta la educación media general y media técnica y todas las modalidades del subsistema de educación básica.
“También podrán formar parte de la comunidad educativa las personas naturales y jurídicas, voceros y voceras de las diferentes organizaciones comunitarias vinculadas con las instituciones y centros educativos”.
La Ley Orgánica de Educación promulgada por el chavismo modificaba, como puede verse la constitución de la Comunidad Educativa que, hasta entonces, como vimos líneas arriba estaba integrada únicamente por “educadores, padres o representantes y alumnos”.
La Resolución Nº DM/058 que se publicó el 16 de octubre de 2012 en la Gaceta Oficial Nº 40.029 estableció los Consejos Educativos, los cuales serían las únicas instancias de organización de la Comunidad Educativa y que se definían como (…) la instancia ejecutiva, de carácter social, democrática, responsable y corresponsable de la gestión de las políticas públicas educativas en articulación inter e intrainstitucional y con otras organizaciones sociales en las instituciones educativas. Ella es concebida como el conjunto de colectivos sociales vinculados con los centros educativos en el marco constitucional y en las competencias del Estado Docente. Sus integrantes actuarán en el proceso educativo de acuerdo con lo establecido en las leyes que rigen el Sistema Educativo Venezolano, fundamentado en la doctrina de nuestro Libertador Simón Bolívar”.
Los Consejos Educativos estarían integrados “padres, madres, representantes, responsables, estudiantes, docentes, trabajadoras y trabajadores administrativos, obreros y obreras de las instituciones educativas, desde la educación inicial hasta la educación media general y media técnica y todas las modalidades del subsistema de educación básica. También podrán formar parte de la comunidad educativa las personas naturales y jurídicas, voceros y voceras de las diferentes organizaciones comunitarias vinculadas con las instituciones educativas”.
Quedaba, por tanto, diluido y desarticulado el papel fundamental y protagónico que los padres, representantes o responsables tenían en el proceso educativo de los niño y adolescentes[3].
La iniciativa gubernamental encendió las alarmas de la sociedad civil venezolana que vio en la resolución la intención de politizar la educación, como advirtió Olatz Isasi, Coordinadora Académica del Centro de Derechos Humanos de la UCAB, quien subraya que, si bien en apariencia no violaba el derecho a la educación, sí abría espacios para dicha politización.
Isasi destacó que, en uno de sus considerandos, la resolución señalaba que “los ambientes escolares son espacios abiertos los 365 días del año para la enseñanza y el aprendizaje, la práctica democrática y la transformación de la estructura institucional necesaria para el desarrollo del poder popular”, mientras que el Poder Popular tiene como uno de sus fines, “(…) construir las bases de la sociedad socialista, democrática, de derecho y de justicia”, haciéndose repetidas referencias a los consejos comunales y a los colectivos sociales como miembros de los comités del Consejo Educativo con injerencia en planificación, ejecución, seguimiento, control, supervisión y evaluación dentro de las instituciones educativas.
En tal sentido, la experta alertaba de la posibilidad de que la escuela se convirtiera en un espacio de ideologización que atenta contra “el necesario pluralismo que garantiza la educación de calidad, descrita tanto en el artículo 26 párrafo 2 de la Declaración de los Derechos Humanos como en Art. 102 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela”[4].
El Observatorio Educativo de Venezuela advirtió que para la formulación de la Resolución 058 no se convocó un proceso formal de consulta pública sobre el contenido de la misma[5].
La sociedad estaba clara en que el objetivo de la Resolución 058 sólo era el adoctrinamiento socialista[6].
La letra cambiada
Pero los decretos, reformas legislativas y las resoluciones administrativas no han sido los únicos mecanismos implementados por el chavismo para concretar su objetivo de adoctrinamiento de los niños y adolescentes venezolanos, sino también mediante el contenido de los textos de estudio y de los currículos educativos.
La tergiversación de la historia, la magnificación de la figura de Hugo Chávez y la minimización del periodo democrático comprendido entre 1958 y 1998, son también parte de la estrategia de ideologizar a los menores.
La exministra de educación, Maryann Hanson, lo dijo sin cortapisas: "Sabemos, y todo el mundo sabe, que la educación es el aparato de reproducción del Estado. Nosotros estamos intentando crear un Estado socialista y tenemos que reproducir la ideología de un Estado socialista", mientras implementaba el reparto de 5 millones de ejemplares de la Constitución de 1999 “ilustrada” en las escuelas públicas.
Otro ministro del despacho que tampoco tuvo empachó en admitir el hecho fue Aristóbulo Istúriz, quien manifestó que efectivamente el gobierno procuraba utilizar la educación como vehículo de adoctrinamiento. “Estamos ideologizando y qué”, desafió Istúriz cuando fue consultado al respecto.
Una versión de la carta magna que de acuerdo a la ONG Asamblea de la Educación inició el proceso ideologización a través de los textos con que se forman los niños venezolanos. La “Colección Bicentenario” que recoge materias sobre Ciencias Naturales, Ciencias Sociales, Lenguaje y Matemáticas igualmente fue usada con tal objetivo. La revisión de los textos de Ciencias Sociales permitió constatar, por ejemplo, que 20 páginas condensaron el haber de 9 presidentes venezolanos, mientras que Hugo Chávez se le dedican 26 páginas e, incluso, se lo iguala al libertador Simón Bolívar
Libros que cantan odas a Hugo Chávez ensalzado prácticamente como héroe nacional, enaltecen las políticas gubernamentales del chavismo y sobredimensionan la “revolución” a nivel de campaña libertaria.
Analistas como Daniel Lansberg-Rodríguez catalogaron tal acción como la mediocretización e ideologización de la educación pública venezolana. "Con el pasar de los años, los libros escolares lucen cada vez más como panfletos políticos en vez de otorgarles a los jóvenes, herramientas mediante las cuales puedan crear sus propias convicciones como ser pensante e independiente"[7].
Con Maduro el adoctrinamiento continúa
El adoctrinamiento de infantes y adolescentes no es una actividad que habría desaparecido con la muerte de Chávez, sino que se mantiene y se profundiza en el régimen de Nicolás Maduro a quien en septiembre de 2020 fue denunciado por la organización Prensa Sin Mordaza de haber conformado campos de concentración destinados al adoctrinamiento de niños.
Se trata, según los denunciantes de "campos de juventud revolucionaria" en los que se les inculca a los menores el pensamiento político comunista y militar del finado Hugo Chávez.
La denuncia que estuvo acompañada de un video, señala que uno de estos supuestos campamentos está ubicado en las afueras de Valencia, estado Carabobo. Allí, los niños y preadolescentes serían entrenados para "dar una batalla contra el imperio Yankee".
En el referido video[8] es posible ver el testimonio de un menor de estos campos en el que habla de la "lucha revolucionaria y la batalla contra Estados Unidos"[9].
El niño dice que en el campo “le han dado una gran formación ideológica, algo muy importante para la juventud. Y, bueno, estoy aquí para eso, para una formación y ser un gran futuro de Venezuela, un joven más que ponga un granito de arena para Venezuela, para que sea una potencia, para invertir aquí un potencial en Venezuela”.
Le preguntan de qué se trata la formación ideológica y el menor indica que se trata del aprendizaje del “pensamiento de Chávez, algo que nos inculcó, algo muy importante, no nos adoctrinó, ni nos puso, ni nos dijo, nos formó.
Advierte que parte de las enseñanzas que recibe versa sobre que "EEUU no quiere que haiga (sic) jóvenes formados, porque saben que le vamos a dar la batalla, le da miedo, les duele, no les gusta, porque saben que un joven se les para y les da miedo, porque les recuerda a Chávez. Chávez le da la lucha como la vamos a dar los jóvenes que vamos a defender a Venezuela, como vamos a defender nuestra patria y seguiremos teniendo patria”.
REFERENCIAS
[1] El Nuevo Herald. “Ministro: no peligra la patria potestad de los padres”. 13 de agosto de 2009. https://www.elnuevoherald.com/noticias/america-latina/venezuela-es/article1998044.html
[2] Latin American Studies. El Nuevo Herald. “Chávez insiste que el Decreto 1011 va”. 2 de abril de 2001. http://www.latinamericanstudies.org/venezuela/decreto-1011.htm
[3] Redalyc. Cuestiones Jurídicas. “Resolución 058 mediante la cual se establece la normativa y procedimiento para el funcionamiento del Consejo Educativo: contenido e implicaciones”. https://www.redalyc.org/pdf/1275/127532358003.pdf
[4] UCAB. “Análisis de la Resolución 058 del Ministerio de Educación desde un enfoque de derechos humanos”. http://w2.ucab.edu.ve/tl_files/CDH/Lineastematicas/Analisis%20de%20la%20Resolucion%20058%20del%20Ministerio%20de%20Educacion%20def.pdf
[5] Observatorio Educativo. “La resolución 058 y el derecho a la educación”. https://observatorioeducativo.org/2012/10/25/la-resolucion-058-y-el-derecho-a-la-educacion/
[6] Venezuela Awareness. “La larga lucha del ‘con mis hijos no te metas’”. 18 de noviembre de 2012. https://www.venezuelaawareness.com/2012/11/la-larga-lucha-del-con-mis-hijos-no-te-metas/
[7] La Segunda Online. “Concientizacion escolar en Venezuela: ‘¡Con mis hijos no te metas!’". 19 de octubre de 2013. http://www.lasegunda.com/Noticias/Internacional/2013/10/886859/concientizacion-escolar-en-venezuela-con-mis-hijos-no-te-metas
[9] NTN24. “Régimen de Maduro concentra niños en campos de adoctrinamiento”. 13 de septiembre de 2020. https://www.ntn24.com/america-latina/venezuela/regimen-de-maduro-concentra-ninos-en-campos-de-adoctrinamiento-125885