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miércoles, 6 de julio de 2011

El “cáncer” de Chávez


Relanzar la figura de Hugo Chávez en el ámbito nacional, de cara a las elecciones presidenciales del 2012, y frente a un panorama internacional nada halagador, representaba un reto para los asesores de imagen del desgastado caudillo, quien luego de 12 años de estar el poder, sólo puede exhibir un caos económico, político y social sin parangón en la estropeada historia contemporánea de Venezuela. 


Ayer…

Chávez ha sido capaz de todo. Desde su penosa aparición en la vida pública de los venezolanos, en aquel fallido golpe de Estado del 4 de febrero de 1992, hasta su llegada a Miraflores a través de las elecciones en 1998, este militar de izquierda ha utilizado todas las técnicas existentes para hacerse notar, para manipular, burlarse de las elites políticas de la época y para imponerse en el escenario nacional e internacional, contrayéndose un liderazgo pagado con la renta petrolera para lograr sus objetivos oscuros.

Desde el inicio, Chávez ha  jugado con la buena fe de la sociedad venezolana, y  ha utilizado las  debilidades y malformaciones culturales, políticas e institucionales de la Venezuela de finales del siglo XX, para imponerse como la deidad del siglo XXI, infalible e invulnerable.

Una vez que asumió en poder, echó por tierra lo que quedaba de institucionalidad, destruyendo a su paso todo lo que encontró, y medio construyendo, de manera torpe pero consistente, un modelo de sociedad que no comulga con los intereses de los venezolanos, ni con su idiosincrasia.
Durante 12 largos años, la sociedad venezolana ha sido sometida a una especie de pesadilla mediática y verbal, que ha logrado trágicos frutos. 

Los enormes logros de Hugo Chávez –lamentable- no se pueden exhibir en lo económico, en lo educativo, lo social, ni en salud ni en avances tecnológicos. No. Los grandes alcances de la “revolución chavista” se miden en los niveles de odio que se han engendrado en la sociedad, en el incremento del clientelismo, en la manipulación de las capas bajas de la población que han sido víctimas de las tretas sicológicas comunistas. Chávez ha sembrado en la mente del colectivo paradigma de una anti sociedad donde no existen valores, ni ética, ni responsabilidad social ni honestidad. Persisten dos Venezuela encerradas en un solo territorio abrumado por la incertidumbre de un futuro incierto. 

Las viejas técnicas decimonónicas de manipulación de masas, reforzadas por los nefastos gobiernos totalitarios y autoritarios del siglo XX, fueron usadas magistralmente por Chávez para sembrar dependencia y sumisión, en la mente de una parte de la sociedad que carece de educación y de cultura. 

En base de la manipulación de los pobres,  la división de la clase media, la “extirpación” de oposición, la corrupción, la amenaza, la expropiación, la persecución y la imposición del miedo y el terror- como herramientas políticas- Chávez logró controlar el poder y gobernar a su antojo. Su temperamento, su disposición, su ambición y su megalomanía lo empujaron por perversos caminos que le garantizaban una “gloria internacional”.   

A lo largo el trayecto, Chávez ha dejado ver sus flaquezas y sus debilidades, especialmente en aquellas oportunidades en las que las exigencias son superiores a su talento. Chávez ha dejado escapar su miedo y cobardía en algunas circunstancias en las que el caudillo ha preferido “enconcharse” o mantenerse en silencio, para pasar la marea.
El caudillo sabe de sobre que tiene un impresionante talento como manipulador, y que ha logrado con éxito trasformar fracasos en victorias políticas. Esta vez, no es diferente. 

La enfermedad como escudo salvador 

Chávez se ha atrevido -nuevamente- a capitalizar a su favor, la lástima del pueblo. “Su terrible enfermedad” es usada como herramienta para neutralizar la enorme lista de desafueros que se ha cometido su gobierno. Desesperadamente busca apagar las pasiones de sus demonios, llamando a una unidad que “únicamente él” puede garantizar. 

Venezuela esta entrampada y frente a un abismo. Este es el resultado por la irresponsabilidad de una sociedad que lo aplaudió y lo dejó actuar a sus anchas. Para buscar una salida nos toca ponernos creativos, utilizar los mejores talentos e imponer la cordura como único elemento para sobrevivir al cáncer social que Chávez inyectó -sin vacilaciones- al país y que lo mantienen en estado moribundo, y al borde del abismo.   

martes, 5 de abril de 2011

El Nuevo Autoritarismo en América Latina

Por Maibort Petit

El nuevo Autoritarismo, representado por Hugo Chávez y otros jefes de gobierno que han calcado su modelo, dista mucho de ser DEMOCRATICO, PLURALISTA Y REPRESENTATIVO aunque, éstos utilicen los mecanismos ideados por la democracias, incluyendo sus instituciones y conceptos, para lograr concretar sus proyectos políticos ligados al socialismo y al comunismo de corte castrista.


Chávez dejó claro cuáles eran sus concepciones políticas cuando atentó contra las instituciones democráticas representativas el 4 de febrero de 1992. Su fallido golpe de Estado contra el entonces presidente Carlos Andrés Pérez rebeló su tendencia militarista, autoritaria y de desprecio a la democracia y a las normas.


Luego de su fracaso, de sus estancia en prisión y de sus tutorías con Castro, Chávez utilizó los mecanismos democráticos para llegar al poder, ganó las elecciones sin trampa en diciembre de 1998, y ascendió al poder en 1999. Desde el mismo momento que se hizo del poder, arremetió en contra del institucionalismo, cerró con el Congreso electo en noviembre de 1998 por votación popular, y la Corte Suprema de Justicia, violó la Constitución Nacional de 1961, creó una Asamblea Constituyente conformada por sus acólitos, transformó al país a su antojo, cambió la historia y los símbolos patrios, destruyó la economía privada, enterró al institucionalidad de las Fuerzas Armadas, persiguió a sus opositores enviándolos a la cárcel, al cementerio o al exilio, elaboró leyes a su antojo, impuso las bases de un modelo socialista que los venezolanos desaprobaron, cometió delitos de corrupción, de malversación, de lesa patria, dividió al país en dos bandos, creo grupos de violencia subvencionados por el Estado para arremeter contra ciudadanos desarmados, medios de comunicación, Iglesia católica, periodistas, y opositores a sus ideas. Confiscó bancos, haciendas, empresas, clínicas, etc. Entre otros delitos, consiguió imponer la reelección indefinida, gracias a la cual amenaza con quedarse en el poder hasta su muerte. Paralelamente, se impuso como único poder, quitándole la independencia al poder legislativo y al poder judicial, colocando en puestos claves a militares y civiles partidarios de una revolución bolivariana por la que nadie votó en 1998.


Con 11 años en el poder, Hugo Chávez ha sido la antitesis a la democracia, a la pluralidad y al Estado de derecho. Su escaso respeto a las leyes y a la constitución convierten su gobierno en un régimen de carácter autoritario, A PESAR QUE DURANTE MAS DE UNA DECADA HA UTILIZADO EL SISTEMA DE ELECCIONES PARA LEGITIMAR CADA UNA DE LAS ACCIONES, Y PARA LAVARSE LA CARA ANTE LA CADA VEZ MAS COMPLICE COMUNIDAD INTERNACIONAL, REPRESENTADA POR ORGANISMO DESCALABRADOS, BUROCRATICOS Y ARRODILLADOS AL DINERO Y A LOS INTERESES, Y GOBIERNOS QUE ACOJEN EL SILENCIO PARA EVITAR LoS CONFLICTOS Y LOS INSULTOS DE CHAVEZ.


Con su amplio historial antidemocrático y como violador de las libertades públicas, no puede HUGO CHAVEZ haberse convertido en democrático tras unas elecciones parlamentarias que estuvieron llenas de irregularidades, desde el mismo inicio, pero que la oposición aceptó, y los venezolanos que votaron también como único mecanismos existente para tratar de parar a esta pesadilla macabra y abusiva que convirtió un país petrolero en una hacienda personal poblada por millones de pobres, desempleados, acosados por la delincuencia, la inflación, la decadencia de los servicios públicos, los odios y las divisiones sociales y un caos político sin precedentes.


Las elecciones parlamentarias de septiembre 26 de 2010, legitimaron a Hugo Chávez y su régimen. Si. Y lamentablemente, ese acto usado por los venezolanos con consciencia democrática, para demostrar que son la mayoría y que están hartos del chavismo, trajo como consecuencia una LEGITIMACION INTERNACIONAL DEL REGIMEN AUTORITARIO DE HUGO CHAVEZ.






Desde su llegada al poder, Hugo Chávez ha realizado


4 referendos, y más de 10 elecciones, lo cual NO SIGNIFICA QUE CHAVEZ SEA UN DEMOCRATA. NO. Este historial absurdo de elecciones y referendos representan UNICA Y EXCLUSIVAMENTE EL CARÁCTER MANIPULADOR QUE EJERCE CHAVEZ para legitimar sus aspiraciones, leyes e intenciones de mantenerse en el poder por siempre. Es obvio, que el sistema de elecciones es un arma usada por el oficialismo para cubrirse las espaldas.